Las impresoras 3D han venido para cambiar la forma en que vemos el mundo y como producimos objetos, desde elementos básicos como llaveros, figuras hasta brazos o piernas para personas que tristemente han perdido alguno de estos miembros, como el caso realizado por el español Guillermo Martinez.

3D Bio una empresa dedicada exclusivamente a la creación de elementos biológicos en 3D ha intentado llevar esto un paso más allá, y ha conseguido algo histórico en la historia de los transplantes médicos. Todo usando técnicas de impresión 3D.

En un hito médico, un paciente nacido con un oído derecho pequeño y deforme ha sido equipado quirúrgicamente con un implante impreso en 3D, un procedimiento doblemente innovador porque el tejido del oído artificial está hecho de las propias células del paciente.

Este implante ha sido parte de una prueba experimental, con riesgos por asumir y con el permiso del propio paciente, en una búsqueda por ver si el mismo era factible, y podemos decir que esto se ha convertido en algo único, primera vez que se consigue.

El nuevo método de reconstrucción del oído podría allanar el camino para el tratamiento de la microtia que es significativamente más fácil que los enfoques quirúrgicos actuales, que requieren técnicas invasivas como la recolección de cartílago de la costilla para construir el órgano.

Este desarrollo de implante 3D puede marcar un antes y después para todos, que con la mejoría de la tecnología y la experiencia a la hora de realizar más cirugías de este calibre pueden hacer que se expanda a nivel mundial y sea de ayuda al mayor número posible de personas.